Llevo ya meses en contacto directo con niños TEA, conviviendo, aprendiendo y sintiendo el amor que estas personitas transmiten. Pero, unido a este precioso hallazgo, observo una realidad muy dura que hasta ahora no había estado tan presente en mi vida. Estos niños y niñas están marginados de la realidad, ¡y no hay derecho!.
Como madre y profesora de emprendimiento, he realizado dos talleres de inclusión y emprendimiento con niños TEA y niños no TEA. Los grupos de trabajo son pequeños dos niños no TEA en un equipo junto con un niño TEA. La idea es potenciar las competencias comunicativas y emprendedoras y comprobar la mejora de la funcionalidad de los niños TEA trabajando con niños no TEA. Así como valorar la interacción entre iguales y el retorno emocional, empático y el rol de mentor de los niños no TEA al trabajar como mentores con niños TEA. Esto último es clave para normalizar perfiles y potenciar la inclusión. La verdad es que uno alucina...Entre los dos talleres que hemos realizado ha habido un avance enorme para ambos perfiles de niños. Y mi idea es seguir realizando algún taller más antes de lanzarme a crear un espacio educativo con recursos de apoyo para familias y centros educativos.
Aquí os comparto el segundo taller. Trabajar el método científico creando una mascota convergente. El equipo de Convergente y yo estamos alucinadas de los logros y avances, así que debemos seguir.
El sufrimiento de estos niños y de las familias merece que reflexionemos sobre qué estamos haciendo con estos niños y qué está en nuestras manos.
A continuación, escribo desde el corazón y desde lo que he aprendido estos meses con mis chicos convergentes.
Primera cuestión. No hay caso TEA idéntico, cada niño TEA es un mundo a descubrir.
No he descubierto la pólvora...cada niño es un mundo, sea TEA o no TEA.
En el ámbito TEA, hay niños muy funcionales e intelectualmente muy inteligentes para los cuales el reto es la autonomía social. En cambio, otros tienen un nivel de funcional mucho menor y para los que el reto claro es la autonomía personal y social. En este segundo caso el trabajo del niño y del entorno debe ser mucho mayor.
El reto de la sociedad para con sus ciudadanos es bidireccional, es decir los niños TEA deben aprender a convivir en la sociedad, pero la sociedad también debe aprender a entenderlos, respetarlos y permitirles crecer como ciudadanos.
- Por un lado, un niño TEA debe aprender a estimular y movilizar emociones y saber interactuar en un mundo complejo y en constante cambio. Aquí las escuelas y los profesionales como Convergente Salamanca son la clave. Los niños aprenderán según patrones que van repitiéndose en su vida.
- Por otro lado, la sociedad debe aprender a normalizar perfiles individuales diversos, eso es así. Y partiendo de que la sociedad somos todos, todos debemos aprender a entender a niños/as TEA. En este sector encuentro dos importantes roles: el de las familias con niños no TEA y el de las escuelas.
Desde las familias, debemos inculcar valores y no estigmatizar perfiles individuales que no encajen con nuestro "súper hombre". Los adultos debemos enseñar a nuestro hijos a convivir y sacar lo mejor de las interacciones con niños TEA, que son puros y transparentes. La base de la convivencia humana está en el respeto y en la inclusión. Y desde casa debe ser una axioma inescrutable. Si acompañamos a nuestros hijos con respeto y amor ante lo que ellos son, les inculcamos la importancia de tener un buen autoconcepto y de ser flexibles y respetuosos con el autoconcepto de sus iguales...no habría daño, ni dolor en niños y niñas que no acaban de encajar o que no son comprendidos en su entorno social cercano.
Desde la escuela, tenemos el enorme reto de educar en un entorno tranquilo que favorezca el respeto y la convivencia entre todos. Y de nuevo, somo adultos y educadores los que debemos crear espacios y contextos que favorezcan la convivencia entre unos y otros. Es muy triste que los niños sean tiranos en el ocio y en el recreo y nada flexibles ante los intereses del resto. Es el equipo educativo el que debe mediar y conseguir que ningún niño esté solo si no quiere estarlo...Es obligación nuestra hacer entender al alumnado que la decisión de qué hacer en el recreo puede y debe ser colectiva y consensuada.
Segunda cuestión. Los niños son ejemplo de lo que ven en casa y hacen en clase.
Si los adultos transmitimos valores, respeto, identidad...Los niños actuarán del mismo modo con sus iguales. Si les enseñamos que cada persona es un mundo y respetable, entenderán que el respeto siempre debe estar en una relación humana. Si enseñamos a los niños que en cualquier interacción humana respetuosa hay aprendizaje mutuo, seguro que aprovechan cada momento con sus iguales. Si pones a un niño delante de un niño TEA y a un niño TEA delante de un niño, se conocerán, se respetarán y aprenderán. Si lo excluyes de realidades corrientes, no sabrán manejarse en situaciones que le plantee la vida con personas diferentes a sí mismo y entonces aparecerá la falta de respeto, la burla, las risas que puede que las haga él a otro o que sea otro el que se ría de él. Normalizar que cada persona es diferente debería ser uno de los grandes retos de las familias y de las escuelas y favorecer situaciones en las que la diversidad y la inclusión estén presente es una intangible fundamental en la educación d elos niños.
👯Ojalá este post sirva para hacer reflexionar a esas familias que potencian la exclusión, que no valoran la diversidad y que están creando niños-monstruo que serán comidos por la propia sociedad.
👯Ojala mi post sirva para calmar el dolor de las familias que sienten la humillación de ver que su hijo no es mirado a la cara por niños no TEA, no es respetado y querido por sus iguales...esos con los que creció desde la primera infancia.
👯Ojalá mi post sitva para poner en valor las escuelas y la necesidad de diseñar espacios y contextos de aprendizaje diverso e inclusivo.
👯Ojalá la mayor innovación educativa fuera dar respuesta a las necesidades de cada niño en su contexto y con sus peculiaridades.
Y mientras este post termina, pienso en cómo el emprendimiento puede unir mentes, cambiar actitudes y permitir que el aprendizaje fluya sin estereotipos...Así que comienza una nueva labor educativa "emprendimiento para la inclusión". Tengo todo el verano para darle forma, pero lo veo claro...hay que crear una hoja de ruta que favorezca la identidad, la inclusión y que una intereses y permita a los alumnos/as adquirir competencias y valores para una vida plena.
Gracias que ya hay ejemplos de inclusión y emprendimiento:
- Convergente Salamanca https://www.instagram.com/convergentesalamanca/
- Club de tenis de Santa Marta. https://www.xataka.com/medicina-y-salud/tenis-santa-marta-mucho-que-tenis-tecnologia-deporte-para-mejorar-condicion-personas-discapacidad