El pasado sábado 24 de mayo asistimos
durante la tarde del sábado a la feria Planea Emprendedores 2014. Ha sido una
bonita experiencia de la que extraemos algunas conclusiones.
Por un lado, conclusiones de
carácter emotivo como por ejemplo que
esta primera promoción de emprendedores del IES Fray Pedro han disfrutado enormemente
durante las 4 horas que hemos estado en
Burgos. Y no sólo eso, en algunos casos
he visto un exceso de responsabilidad en
la preparación de la jornada y en la ejecución de los proyectos que presentamos
a los Premios Planea. Verles implicados en su “Visual Merchandising” en
el montaje de los stands, tomando nota de todos los detalles y por encima de
todo, ver lo orgullosos que estaban de
sus ideas y prototipos cuanto menos
conmueve a quien enseña educación emprendedora.
Desde luego que no proponíamos
ideas ni fáciles ni trilladas, proponíamos las ideas que han surgido de todo un
proceso de ideación y maduración que nos ha llevado todo el curso
materializarlas.
Muchas paredes hemos llenado de murales de
ideación, de dinámicas de brainstorming, de visual
thinking, todo ello para crear un entorno de trabajo libre y rincones
creativos. El resultado de todo este proceso: nuestras ideas, que son
éstas:
1.- Un
paraguas plegable que no se da la vuelta cuando hace viento.
2.-Una silla
escolar ergonómica y unos kit confort para escolares.
3.- Una tienda
especializada en producir y vender cookies a medida del consumidor distribuidas
en un carro-móvil.
Mis chicos han defendido con muchísimo
orgullo sus prototipos, ¡y no pocos visitantes se extrañaron de la presencia de
esas ideas en la feria!...pero bueno, es otra visión, nosotros no nos planteamos el emprendimiento dirigido a la venta fácil en un contexto fácil y sin
riesgo, nosotros lo planteamos como un proceso de descubrimiento, validación y
ejecución en medio de incertidumbres y riesgos que deben reajustar nuestra idea
originaria.
Por tanto una segunda conclusión como docente es que en Planea falla
la base del emprendimiento. Desde mi
punto de vista, más que potenciar el mercantilismo de pulseritas, abalorios y otras manualidades, se
debería introducir al alumnado en el verdadero proceso de ideación emprendedora,
en un entorno de riesgo en el cual la competencia y las necesidades condicionan
el éxito del emprendedor. Incluso más allá que nosotros, algún otro centro se atrevió al
poco mercantil fin de introducir una propuesta innovadora de Aprendizaje Servicio
#1chocolate1Sonrisa. Un proyecto que, desde mi punto de vista, era el más conmovedor, innovador, comprometido y social. ¡Olé!
Faltaron dinámicas pedagógicas para
favorecer el networking y la reflexión. Convencidos de nuestra forma de
trabajo, llevamos un muro de cartón para que los alumnos participantes
expusieran qué significaba para ellos emprender, tristemente se confirmó la
correlación entre mercantilismo y emprendimiento que veíamos en las actitudes e
ideas de la mayor parte de los stands.
La palabra más repetida fue ganancia y negocio. Sólo dos alumnos se aventuraron
a relacionarlo con la idea y con la innovación. En fin, que
no digo que la feria no sea algo atractivo, pero desde mi punto de vista
debería plantearse bien desde la base y que no se centre en la mera venta.
Creo que en esa línea, los I Premio
Planea parece que intentan romper con esa tradición. Pero llevará tiempo cambiar
la manera de hacer las cosas. Como siempre…somos optimistas por el reconocimiento de los jueces
hacia nuestros procesos de innovación y
emprendimiento. Ésta ha sido nuestra
primera feria, la hemos llevado a nuestra manera y de la experiencia nos
llevamos amigos del IES Pintor Luis Sáez
y dos premios: a la mejor RSC y a la idea más innovadora. Una ejemplar lección
para mis chicos, ¡el trabajo bien llevado y ejecutado, casi siempre, tiene
recompensa!, ya lo habéis visto...
En fin… contentos y orgullosos de
las arriesgadas apuestas que hemos llevado, el resultado deja claro que hay cabida en la escuela para introducir la
creatividad y la innovación, y que estos
aspectos son valorados, NO SON UTOPÍA DE
MANUAL, ES POSIBLE.
¡GRACIAS!